Lletra: Raffles – Música: Felipe Orejón – Intèrprets: Casilda Vela
I En San Feliú de Guixols vió la luz esta gitana, y es porque mi mare no se encontraba ya en Tarrasa el día que nací yo. No, señor. Y allí entre mi gente cantando y bailando, creció mi persona sin saber yo cuándo. Y ya mayorcita, al son del pandero, en busca de suerte, seguí mi sendero. Dicen que lo primero que dije fué: Puig y Cadafalch. Al verme tna lista me llevaron por los pueblos en caravana, pidiendo una limosnita por el amor de Deu. Y mientras bailaba me gritaban noyas y nois: Refrán ¡Ay gitana, gitana, tienes mucha gracia bailando sardana! II He conseguido después ser una gran pitonisa y a Cambó le adiviné que se aflojaba la Lliga, si no que lo lliga él. Eso es, Y a un pobre gitano que vi en la agonía, le dije a su gente que pronto moría. Y a los doce meses de mi profecía supe que al enfermo le mató un tranvía. Escolta noy, si te pones deus centims en la palma de la má, le asierto cuanto van a bajar las subsistencias y que una dona mu bufona se va a morir por ti. Al refrán. III Te la digo resalat, carita de pandereta, que te voy adivinar quién está por ti chaveta; lo digo de veritat, veritat. Ya sé que presumes y eres pinturero y a cuantas te gustan las dices te quiero. Mas luego en tu casa sé que la costilla a veces te pone a soplar la hornilla. De manera que no seas pasmat y dame algo para quew la mía canalla se pueda comer un plato de monchetas. ¿No? Miri qui li digui qui vingui y que cantingui: Al refrán.